Las basuras toman el poder
24 de marzo de 1976
Una mañana triste y gris
En la madrugada del 24 de marzo de 1976, las Fuerzas Armadas derrocaron a Isabel Perón, aplicaron un profundo programa de ajuste económico y pusieron en marcha un sistemático plan de represión ilegal que provocaría la desaparición de 30.000 personas
24 de marzo de 1976
Una mañana triste y gris
En la madrugada del 24 de marzo de 1976, las Fuerzas Armadas derrocaron a Isabel Perón, aplicaron un profundo programa de ajuste económico y pusieron en marcha un sistemático plan de represión ilegal que provocaría la desaparición de 30.000 personas
1 comentario:
Cacho: Tal como vos decis: las basuras tomaron el poder. Tenemos que estar atentos porque tienen sucesores y estan queriendo volver. De la mano de gente de campo, de trabajo y que tienen reclamos legitimos y justos, se los puede ver revolviendo el avispero. Lo que no debemos olvidar, sobre todas las cosas, son sus nombres y apellidos, hoy se llaman Fraga, Pando, Miguens. Las cuevas de la bestia siguen siendo las mismas: SRA, Carbap. Y fijate vos que durante la huelga y el bloqueo economico que hicieron hace un mes y que amenazan con hacer nuevamente, no pararon nunca los puertos donde sacaban sus exportaciones. Ahi esta el quid de la cuestion: en la decada del 70, se apropiaron de la renta del pais, lo que no pudieron manotear por derecha, lo hicieron engrosando la deuda externa con Martinez de Hoz, Aleman y Sigaut, y para remachar la cuestion, un Cavallo nos traspaso sus deudas a todos, quedandose con el capital. Nunca fueron juzgados por ese genocidio, y ahora lo quieren volver a ejecutar. Esa semilla debemos seguir sembrando, hacer conocer la historia a todos los que podamos, en todos los ambitos, para que no nos encuentren dormidos. Los idiotas utiles siguen entre nosotros y los podes ver y escuchar todos los dias, en el colectivo, la verduleria, la oficina. Y los medios estan dandole manija a esa cuerda, quienes vivimos aquello, sabemos reconocerlo, y si no lo sabemos debemos educarnos para reconocerlo. Esa es nuestra tarea, dia a dia, en el trabajo, la escuela, la esquina y en el colectivo tambien, con la voz bien alta. Te envio un abrazo.
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